Tu guardatiempo necesita atenciones especiales y mantenimiento constante. Aquí te decimos cómo darle el trato que se merece.

Si es un reloj mecánico, es conveniente que se le dé cuerda hasta que se sienta un tope. Ten cuidado ya que si lo forzas de más podrías romperlo. Si es una pieza automática lo ideal es ponerle solo un poco de cuerda y dejarlo trabajar. Cuando necesites poner tu reloj a tiempo y éste tenga fechador, no realices el cambio entre las 10 de la noche o las 10 de la mañana si la pieza tiene la complicación de calendario sencillo. Si tu reloj tiene calendario perpetuo, habrá que evitar cambios rápidos entre las 9 de la noche y las 6 de la mañana ya que todo el sistema de calendario está conectado y se puede dañar alguna pieza. Evita acercar tu reloj a campos magnéticos como telefonía, electrodomésticos o imanes ya que esto altera la marcha de tu reloj. Por mucho que cuides tu reloj, es importante que estés consciente de que necesitará servicios de mantenimiento. Al llevarlo con un experto evitarás que trabaje “en seco” y no se desgastarán las piezas.

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